Praça Das Crianças

Rio de Janeiro

2013

Las soluciones técnicas y de diseños del proyecto realizado en la favela Vital Brasil se plantearon con la idea simbólica y funcional de equipar un espacio residual. La excusa era perfecta y otra vez la arquitectura sirve para aglutinar intereses y generar un grupo de trabajo que pueda continuar con proyectos en esta línea colaborativa.

Los diseños se hicieron por lluvia de ideas evaluando su facilidad en la construcción, el acceso a los materiales, su funcionalidad y una imagen amable. La mediación y toma de datos para el desarrollo del proyecto se hizo en poco tiempo, pero con numerosos niños que participaron con sus sugerencias y votaron democráticamente el nombre de la plaza. Se les propuso antes que evaluaran el mismo como significado colectivo de los niños de Vital Brasil y que perdurase en el tiempo. El desbroce, la limpieza, la colocación, el hormigonado de los bancos-grada, la pintura mural, la valla “anti-balonazos”, el columpio de madera utilizado con entusiasmo por los niños, etc. iban construyendo un espacio, sobre todo humano, que tendrá que mejorarse y mantenerse. Durante la obra, se rompió una tubería de agua de la plaza y fue motivo de celebración por los niños. Este tipo de accidentes han acompañado a los moradores en la construcción de su barrio, comunicando positivismo y unión envidiable, ya que son la base fundamental para afrontar la construcción de un espacio común.

También ha sido importante en el proceso conocer a gente como Magrau, Carlos, José, Luana, y otras tantas personas, aunque me quedo con los mencionados simplemente por montar, tras esa experiencia, el colectivo llamado Enxame, con el cual actualmente tenemos relación y colaboramos cuando podemos. Es de nuevo el ejemplo de que las experiencias conjuntas de construcción colectivas generan grupos nuevos con los que se intenta mantener los vínculos laborales o de amistad.